Cada fin de temporada llega a a nuestras vidas con melancolía por lo pasado, ilusión por lo nuevo y, sobre todo, pereza porque tenemos que hacer el “cambio de armario”. Una tarea sencilla pero tediosa que a nadie, salvo a Marie Kondo, le apetece hacer. Sí, en los países estacionales, reorganizar el armario colocando más a mano la ropa de invierno o de verano, según la fecha, es una labor que tenemos que hacer todos los que, tristemente, no tenemos vestidor.
El cambio de armario, sin embargo, puede convertirse en el momento perfecto para organizar la ropa que tenemos de forma más optimizada, sostenible y facilitarnos cada día la elección de prendas para vestirnos.
Aquí tienes 8 consejos para hacer el cambio de armario de manera más sostenible:
1. Revisa todo lo que ya tienes: antes de colocar en el armario la ropa de nueva temporada, revísala prenda por prenda. Así recordarás todas las prendas que compraste otros años, podrás ver si hay algo dañado, que ya no te gusta o que llevas años sin ponerte. Es importante que te hagas una idea global de todo lo que tienes porque casi siempre creemos que tenemos menos cosas de las que en realidad tenemos.
2. Selecciona: aprovecha para elegir las prendas que realmente usas. Aunque parezca contradictorio, es más sostenible quitar prendas del armario y dejarlo solo con la ropa que utilizas de verdad. Un armario lleno de cosas que no te pones es un caos, da sensación de que no tienes nada que ponerte e incita a comprar más.
3. Recicla, repara, recupera: Las prendas que ya no usas y no quieres guardar para el futuro, pueden tener muchos usos si las gestionas bien. Puedes donarlas, llevarlas a un punto de reciclaje, venderlas por internet, regalarlas a familiares o amigos… Así podrán usarlas personas a quien de verdad les gusten o les queden bien. Si no te las pones porque tienen algo roto como la cremallera, un enganche o les falta un botón, puedes repararlas. Y una última opción (si no sabes coser) es llevarlas a una modista para transformarlas en otra prenda si tienen una tela bonita pero no te gusta la forma.
Un armario ordenado ayuda a comprar menos ropa.
4. Ordena: coloca el armario bien organizado y mantenlo así en el tiempo. La ropa desordenada suele ocultar prendas al fondo del armario, hace que se te olvide que tienes ropa porque no la ves, arruga y estropea lo que ya tienes. Poder ver la ropa fácilmente ayuda a encontrar las prendas y limita el impulso de nuevas compras. Por eso es más sostenible tener todo bien colocado para elegir las prendas que te vas a poner.
5. Compra bien: Una vez has visto todo lo que tienes, es más sencillo saber si necesitas o no comprar algo. Valora bien las nuevas adquisiciones y mira varias opciones antes de elegir, apuesta por prendas y calzado de calidad, que te guste realmente y te queden bien. Apoya el comercio local y las marcas sostenibles.
6. Di no a la fast fashion: La moda rápida es una de las industrias que genera más basura en el planeta. Basada en un sistema de tendencias pasajeras que cambian continuamente y en confecciones que no duran mucho, hacen que tanto la industria como los consumidores desechemos grandes cantidades de ropa cada año. Tanto las prendas que las marcas no venden, como las prendas usadas que ya no queremos, acaban muchas veces en vertederos. Esta industria fomenta un círculo vicioso de consumo infinito que es insostenible para el planeta. Di no a la moda de mala calidad. Valora lo que vas a comprar y, si no te lo vas a poner al menos 30 veces, no lo compres. Para eventos y ocasiones en que sabes que no vas a volver a usar un vestido puedes alquilar, pedir prestado, intercambiar…
7. Cuida la ropa: mantener la ropa en buen estado es clave para tener un armario sostenible. Cuida todo lo que ya tienes. Mima tu armario, evita que se arrugue la ropa por estar mal doblada, aprende a lavar la ropa para que no se estropee y de forma más ecológica, aquí te dejamos un enlace con algunos tips para una colada sostenible y también tenemos un vídeo en nuestro canal de Youtube.
8. Guarda correctamente: guardar bien la ropa de la temporada que ha terminado también es importante, tanto para que se mantenga en buen estado, como para encontrarla fácilmente en el siguiente cambio de armario. Ordénala como te sea más fácil pero dóblala bien y teniendo en cuenta las prendas más delicadas. Puedes ponerle algún ambientador, si usas antipolillas intenta elegir uno respetuoso con el medio ambiente y usa la mínima cantidad. Si llevas tu ropa al trastero usa cajas aislantes o bolsitas protectoras que preserven la ropa de del polvo y la humedad. Todo lo que puedas guardar colgado se mantendrá mejor y menos arrugado para la próxima temporada.
El cambio de armario no tiene por qué llevarte mucho tiempo, dedícale una mañana o una tarde e intenta terminar todo, incluso la parte de donar ropa. Ser eficaz y rápido con estas tareas hace que nos den menos pereza las siguientes veces.
Si te ha gustado este contenido, pásate por el blog de ActandBe y descubre otros temas interesantes para llevar un estilo de vida más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
